11 de may de 2021
Actualizado: 27 de sep de 2021
A continuación te compartimos las tres recomendaciones principales para tener el control de avance de obra al día.
1. Definir equipo y procesos para la actividad
Se debe definir al equipo encargado de recabar la información en el sitio de la obra, este equipo puede estar conformado por los mismos residentes encargados de supervisión o un equipo de oficina externo a la obra que realice las visitas a la construcción con esa tarea específica. El personal que lleve a cabo esta actividad deberá estar en constante comunicación con la dirección y poder recabar toda la información que se requiere. Además, se deberán establecer reuniones de revisión periódicas para discutir los avances (o retrasos) en la obra y concretar las acciones que se llevarán a cabo.
2. Estandarizar reportes e información
Para que la toma de decisiones sea ejecutiva y del mayor impacto posible, una vez definido el equipo y sus procesos, se deben establecer formatos estándar de reportes en los que se pueda leer la información de manera rápida y se muestren los principales indicadores de desempeño. Estos reportes deberán contener información cuantitativa (porcentaje de avances) y cualitativa (evidencias fotográficas) de la evolución de la construcción. Por otro lado, sería de mucha ayuda que esta información se concentre siempre en un mismo lugar y de fácil acceso para todos los interesados.
3. Implementar un software en el proceso
Utilizar un software como herramienta dentro de este proceso siempre será de gran ayuda, inclusive puede marcar la diferencia entre tomar buenas o malas decisiones. Se debe de emprender la búsqueda de un software que se adapte a los requerimientos de los procesos constructivos y que permita visualizar la información clave, actualizarla de forma inmediata, validarla y que permita el acceso a su consulta desde cualquier lugar.
Prueba SALI, la herramienta diseñada para el levantamiento de avance de obra diario, úsala en su modalidad de app móvil o aplicativo web.